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Que rollo!  Hoy no me ocurre nada para escribir. Pero también, que puede tener una joven como yo para decir?
Ahora estoy en el tren, que pasa por las casas tan rápido que casi ni se consigue verlas, e eso me haz acordar de la vida, que por veces también es así, pasa tan rápido que ni podemos aprovechar todos los momentos de una manera intensa.  
Hay momentos para todo, si es cierto, pero si no podemos saber se  serán buenos o malos, como podremos ir más despacio o más rápido?
Cuando ocurre algo muy malo en nuestra vida, nosotros solo queremos huir para otro planeta muy lejos, es normal, porque toda la gente prefiere huir de los problemas do que enfrentarlos.
Si ocurro algo muy bueno en nuestra vida, nosotros decimos, “que bueno, no podría estar mejor de mi vida, quiero quedarme así o aquí para siempre” o “espiro que este momento nunca acabe”.
Entonces como nos quedamos? Unas veces tan mal que casi nos morimos solo por respirar, otras veces ni conseguimos respirar de tanta felicidad y satisfacción.
Yo soy asi, y sé que mucha gente es también como yo.  Pero yo pienso que  todos deberíamos, parar un poquito esta manera extraña de pensar, de sentir, de hablar, deberíamos aceptar todo lo que nos , acontece y aprovechar las cosas malas para aprender para aprender, para llorar cuando es necesario, y vivir las cosas buenas e aprovéchalas  al máximo, sin pensar que se van acabar.